El plan Marruecos 2030: ¿invasión silenciosa de Ceuta, Melilla y Canarias?

Mientras los ministros hacen turismo diplomático y el presidente firma cheques a dictadores, Marruecos sigue ejecutando su hoja de ruta. Se llama Plan Marruecos 2030, y no es una teoría conspirativa. Lo ha confirmado en Castillón Confidencial el exespía español Fernando San Agustín, autor de La trastienda de los servicios de inteligencia.

El plan es claro: colonizar civilmente territorios españoles como Ceuta, Melilla y las islas Canarias. ¿Cómo? Con paciencia y sin disparar un solo tiro. San Agustín lo explica sin rodeos: “En 2030, la idea es que los ayuntamientos de esas zonas estén ya controlados por población de origen marroquí”. El objetivo: declarar su adhesión a Marruecos desde dentro, por vía política. Sin tanques, pero con Corán y bandera en mano.

No es ficción. Según San Agustín, miles de inmigrantes llegan año tras año en patera con viajes subvencionados por el reino alauita. En Ceuta y Melilla ya el 60% de la población es marroquí. Y en Canarias la presión migratoria se incrementa por goteo, de forma tan continua como estratégica.

¿Y qué hace España? Nada. O peor aún: colabora sin saberlo. “El mayor miedo de Marruecos es que España eduque a esos jóvenes y los convierta en españoles orgullosos de su tierra de acogida”, afirma el exespía. Por eso, cuanto más desatención, más fácil es que la identidad cambie de bandera.

El plan no se esconde. Ni la CIA ni la NSA ni el CNI lo ignoran, pero ninguno ha actuado. El silencio institucional solo alimenta la certeza: Marruecos sueña con un nuevo imperio y tiene prisa por cumplirlo. Mientras en Bruselas se preparan para organizar el Mundial 2030 con Marruecos como anfitrión de la final, ellos ya han puesto las fichas sobre el tablero.

¿Y si lo de Ceuta, Melilla o Canarias no fuera una amenaza futura, sino una partida ya en marcha?