Begoña Gómez pudo pagar casi 40.000 dólares para acelerar su nacionalidad dominicana

Compártelo:

Hoy retomo una exclusiva que dimos hace seis meses. Entonces, algunos se rieron. Ahora, las piezas encajan.

Según la información que hemos podido verificar desde España y desde República Dominicana, Begoña Gómez —la esposa del presidente del Gobierno— dispone de nacionalidad dominicana. Sí, has leído bien.

Pero hoy podemos añadir datos nuevos, más incómodos todavía.

Begoña Gómez usa pasaporte diplomático. Con ese pasaporte nadie le abre una maleta, nadie inspecciona su bolso, nadie pregunta nada. Además, utiliza el Falcon del Ejército del Aire, un avión reservado para cargos públicos y autoridades.

Ella no es cargo público. Es “la esposa de”.

Sin embargo, según nuestra información:

Begoña Gómez viajó en Falcon a República Dominicana para tramitar su nacionalidad de forma urgente y silenciosa. Y pudo pagar casi 40.000 dólares para acelerarla.

Y todavía hay más. Esto no fue solo dinero. Hubo favores. Hubo intermediación.

Y ahí aparece un nombre que el Gobierno preferiría que nadie conociera.

Hechos verificables

Begoña Gómez habría viajado en el Falcon del Ejército del Aire hasta el aeropuerto de La Romana (República Dominicana).
Utilizó pasaporte diplomático, lo que permite salir y entrar sin controles ni inspección de equipaje.
Según nuestra información, pudo pagar casi 40.000 dólares para tramitar su nacionalidad dominicana de forma urgente y con sigilo, sin transparencia.
Solo un puñado de funcionarios conoce el expediente, el pago y el motivo.
Hubo algo “muy parecido a un trueque” o a un favor político.
En ese punto aparece Romina Caterina León Santos, cónsul en Valencia y madrastra del presidente dominicano, Luis Abinader.
Esta cónsul estuvo vinculada a una investigación policial por venta ilícita de pasaportes.
- Se pagaban hasta 2.000 euros por pasaporte sin documentación.
- La investigación afectaba al consulado, pero ella no fue detenida por inmunidad diplomática.
Según nuestras fuentes, Begoña Gómez habría olvidado esas “pequeñeces”, como la compraventa de pasaportes, para conseguir un trámite exprés.

La pregunta es inevitable: ¿por qué alguien con causas judiciales abiertas en España corre a sacarse una nacionalidad extranjera?

No es una insinuación. Es una pregunta.

La familia de Begoña Gómez, según nos cuentan, está avergonzada por todo lo que se publica sobre el entorno: prostíbulos, drogas, tiroteos en saunas, explotación de mujeres y menores.

¿Su plan?
Poner mar de por medio. Irse a República Dominicana antes del juicio.

La duda es cuándo.