Matar una rata en casa puede costarte 18 meses de cárcel en España

España se supera cada día en el absurdo legislativo. Y la última prueba la encontramos en la ley de bienestar animal: si usted mata una rata en su propia casa, puede enfrentarse hasta a 18 meses de cárcel.

Sí, lo han oído bien. La norma considera que los roedores son animales vertebrados y, por tanto, su muerte puede ser tipificada como maltrato.

El texto incluye una excepción: se permite el control de plagas, siempre que lo hagan profesionales y mediante métodos no letales. Ahora bien, ¿qué método no letal conocen ustedes para acabar con una plaga de ratas? ¿Invitarlas a cenar a casa del vecino? ¿Contratar al flautista de Hamelín?

La realidad es que todos los supermercados siguen vendiendo matarratas en cajitas. Y muchos expertos coinciden en que la ley es tan ridícula que ni sus propios autores saben cómo aplicarla.

Lo decía un colaborador del programa: parece que quienes han redactado esta ley han tenido una infancia marcada por Disney, convencidos de que las ratas son como las de Cenicienta, dulces y simpáticas.

El problema es que mientras tanto, el ciudadano que se defienda de una plaga puede acabar con antecedentes penales. Y todo ello mientras el gobierno presume de proteger animales, pero ignora a enfermos, familias y trabajadores.

Una ley que, como tantas otras, no resuelve nada y solo complica la vida de los españoles.