Agustín Laje: “La izquierda no es adversaria, es enemiga”

En una reciente charla en Madrid, el analista argentino Agustín Laje expuso una reflexión directa y sin concesiones sobre la violencia política y la manipulación del relato. Citó casos concretos: el disparo contra Miguel Uribe en Colombia, amigo suyo y candidato presidencial; el asesinato de Fernando Villavicencio en Ecuador; el apuñalamiento de Jair Bolsonaro en Brasil; e incluso el intento de asesinato contra Donald Trump.

Laje destacó un patrón: “Siempre son los candidatos de derechas los que son baleados o asesinados”. Y cuestionó la supuesta preocupación de la izquierda por los derechos humanos y la democracia: “Es todo mentira. Odian al ser humano, odian la democracia”.

Para él, el problema está en el marco mental con el que se concibe la política. La izquierda no es un adversario con el que debatir, sino un enemigo que busca “robar nuestra propiedad, someter nuestra libertad y, si es necesario, atentar contra nuestra vida”. Equipara esa amenaza a la de un delincuente que entra en tu casa con una pistola: no es rival, es enemigo.

En su propuesta, la batalla cultural exige cambiar el lenguaje y los conceptos. Recuperar para la derecha términos como “democracia” o “derechos humanos”, que considera secuestrados por la izquierda, y dejar de aceptar un juego donde las reglas están manipuladas para favorecer siempre a un lado.

El mensaje es claro: no se trata solo de ganar elecciones, sino de disputar el terreno cultural, mediático y moral. Para Laje, quien no entienda eso seguirá peleando en desventaja, mientras su adversario —o enemigo, como él lo define— actúa con ventaja y sin escrúpulos.