La dejadez de los españoles frente al fraude electoral de Sánchez

El perito psicólogo Julio Bronchal lo dijo con una claridad que duele: “Hay una dejadez tremenda de los españoles para luchar contra el fraude electoral de Sánchez.”

No basta con indignarse, con comentar en privado o con compartir mensajes en redes sociales. La pasividad ciudadana frente a un fraude que se repite elección tras elección es lo que permite que el sistema siga funcionando sin resistencia real.

Bronchal recordó que el fraude no es una sospecha, sino un hecho que se ha documentado en IFEMA, en Indra y en los propios testimonios de funcionarios que presenciaron irregularidades. Y sin embargo, en lugar de salir a la calle, exigir transparencia y reclamar justicia, millones de españoles han optado por la resignación.

La psicología lo explica: cuando el ciudadano siente que nada cambiará, se refugia en la apatía. Pero esa apatía es precisamente lo que necesitan los que manipulan el poder. La dejadez es el caldo de cultivo perfecto para la tiranía.

Si aquí hubiera la misma reacción que en otros países —donde un fraude electoral provoca movilizaciones masivas— la historia sería distinta. Pero en España, la comodidad, el miedo y la desconfianza hacia la política han hecho que se acepte como normal lo que debería provocar escándalo nacional.

La advertencia de Bronchal no puede caer en saco roto: si los españoles no reaccionan, si no se implican, si no dejan la dejadez a un lado, el fraude seguirá repitiéndose una y otra vez.

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