Descubrimos quién es el hombre que guarda el tesoro en criptomonedas de Maduro

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Hoy puedo afirmarlo: hemos puesto rostro y nombre al hombre que guarda el tesoro en criptomonedas de Nicolás Maduro. No es un rumor. No es una teoría. Es una exclusiva.

Se llama Taoti Abdelgani.
Y hasta ahora, nadie había mostrado su cara.

Durante años, el régimen venezolano ha desviado millones: oro, piedras preciosas, dinero en efectivo y transferencias fuera del sistema bancario. Pero el mayor botín no está en cajas fuertes. Está en criptomonedas.
Maduro no cobró el petróleo a China en dólares: lo cobró en cripto para esquivar sanciones internacionales.

Mientras el fallido experimento de su criptomoneda oficial, el Petro, se hundía, el dinero real se movía a monederos privados. Y ahí está el punto clave: esos monederos no están en manos de Maduro ni de su círculo político.
Están en manos de un solo hombre.

Abdelgani no es un técnico ni un hacker. Es el intermediario perfecto entre Venezuela, Irán y África. Viaja con múltiples pasaportes y se mueve por países donde el control institucional es mínimo. Es lo suficientemente discreto como para pasar desapercibido en cualquier aeropuerto, pero lo suficientemente relevante como para que agencias de inteligencia, organizaciones criminales e incluso miembros del propio régimen lo busquen.

Última pista confirmada: Dubái.
Un coche vinculado a él fue multado por mal estacionamiento. La multa se pagó en efectivo dos horas después, en un centro comercial, sin dejar rastro electrónico. Se revisan cámaras para confirmar si la pagó él o alguien de su entorno. Cuando estás manejando miles de millones en criptomonedas, cada detalle importa.

No se trata solo de dinero.
Se trata de responsabilidad histórica.

Si este hombre cae, cae la estructura financiera oculta de una de las dictaduras más crueles de América Latina. Y con ello, parte del dinero robado durante décadas podría volver a Venezuela.

Hoy ya sabemos: