El gaditano que llegó a gobernar Roma: Lucio Cornelio Balbo

Hoy quiero hablarles de un personaje casi olvidado, pero fascinante: Lucio Cornelio Balbo, un hispano de Cádiz que acabó gobernando en Roma. Sí, un gaditano que llegó a ser nada menos que cónsul de la República Romana, algo así como presidente de aquel imperio en ciernes.

El historiador Paco Álvarez lo recordaba en nuestro programa: “Lucio Cornelio Balbo, comerciante de Cádiz, acabó convertido en cónsul de Roma, íntimo de César y Cicerón, y logró que todos los gaditanos fueran reconocidos como ciudadanos romanos en el año 49 a.C.”

Balbo empezó como comerciante en su Cádiz natal, pero supo tejer alianzas con los grandes nombres de su tiempo. Pompeyo y Julio César se cruzaron en su camino, y con ellos llegó su ascenso. Le concedieron la ciudadanía romana, un privilegio enorme en aquel tiempo, y acabó sentado en la cúspide del poder.

No fue solo un político hábil: también aportó recursos. La flota de Cádiz sirvió en las campañas de César, lo que demuestra hasta qué punto la Hispania romana era estratégica para la capital del mundo. Y cuando le acusaron en un juicio en Roma, nada menos que Cicerón salió a defenderlo, señal de la relevancia que alcanzó.

Su mayor logro fue conseguir que todos los gaditanos fueran reconocidos como ciudadanos romanos en el año 49 a.C.. Es decir, convirtió a sus paisanos en romanos de pleno derecho. Un cambio histórico que muestra la visión de un hombre adelantado a su tiempo.

Lucio Cornelio Balbo es un recordatorio de que España ya tuvo protagonistas en la historia de Roma, y que desde la periferia también se podía llegar al centro del poder mundial. Una lección de ambición, inteligencia y política que aún hoy merece ser recordada.